miércoles, 12 de mayo de 2010

La Comunidad

Es posible que mi edificio guarde un inquietante parecido con el de "la Comunidad", pero nunca llegué a suponer que, en este mundo viejuno en el que estamos inmersos, fuera de nosotros de quien se quejasen los vecinos.

Los de abajo dicen que arrastramos muebles (!) y, exceptuando aquellos dos días en los que uno de los habitantes se marchó y reorganizamos el espacio, asignando nuevos dominios a dos de los miembros de este hogar, tal cosa viene a ser una sucia patraña.

Pero pongamos que este edificio es lo suficientemente decrépito como para que el vecino sufra los ruidos diarios que hace una persona por el mero hecho de vivir... Lo único que se arrastra en esta casa son las sillas, pero claro, teniendo en cuenta que son de rueditas, fueron diseñadas para rodar...

Obviamente, la cosa no se queda ahi. Resulta que nuestros vecinos de abajo, a su vez tienen unos vecinos abajo bastante más primorosos. Se trata de unos jóvenes universitarios, 6 en concreto (4 de los cuales se llaman Javier (!), es decir, el camarote de los hermanos marx al completo, cuyo tono de voz natural excede al que cualquiera de nosotros utilizaríamos en el contexto de un cabreo momumental. Pues bien, y teniendo en cuenta que yo que vivo dos plantas por encima y hay días en que me vuelven loca semejantes voceras, en teoría, los que viven debajo deberían estar totalmente desquiciados...Éso sería lo lógico.

Pero en un contexto vecinal, la lógica no tiene cabida, o por lo menos no la lógica tradicional, sino la lógica del sucio dinero. Porque estos jóvenes bocalanes son los inquilinos del señor que se queja de nosotros.

La primera conclusión a la que se llega es que aparentemente, si no quieres que se quejen tus vecinos debes esteblecer una relación mercantil con ellos, preferiblemente en negro.

Baste esta pequeña anécdota para introducirnos en le tema que queremos tratar. Asesinato de vecinos, si o no?.

En fin, en la vida en sociedad, que incluye a la convivencia vecinal, nos toca tratar con gente que no nos gusta. Éso es un hecho social: acontece en tu comunidad, en el trabajo, en la sala de espera del dentista, en el metro (dónde gente muy desagradable se empeña en hacer públicas conversaciones telefónicas y llegas a pensar
ojalá te bajes en una estación en curva y se te caiga el iphone entre coche y andén
... En efecto, la misantropía se dispara y tienes que hacer uso de técnicas de meditación para no agredir in situ al personal.

Pero claro, parte del contrato social, que nadie hemos firmado pero que ahí está, implica un pacto de no agresión, y si tanto te cuesta vivir en sociedad, lo que impera es hacerte agro-anarquista e irte a vivir a un pueblo de 8 habitantes y aburrirte como una ostra, eso si, comiendo los tomates que has producido con tus propias manitas.

En fin, os dejo a continuación, una página creada por un sujeto que, con mucha mala leche y bastante ingenio, nos proporciona instrucciones para joder a los vecinos que se quejan de tus ruidos. En ella encontrarás todo tipo de sonidos, que podrás elegir en virtud del ruido que genere ése vecino, para que lo reproducas a todo volumen, haciéndole consciente de que él también molesta.

www.jodealvecino.com/instrucciones.htm

5 comentarios:

pol pot dijo...

En un oficio anterior en otro lugar de estos glamourosos que yo visito... Un señor se quejaba de unos niños diciendo " Es que están por ahí... con las bicis... y con la pelota... jugando y echando carreras", probablemente fuera más envidia de que el próximo a ser octogenario no podía hacer esas cosas... Pues eso, que el último entretenimiento de algunos es pegar la oreja al tabique para luego tener algo de que quejarse... Buena idea... haz lo mismo... que si les chirrían las poleas del tendedero... que tengan las manos limpias cuando aprieten al botón del ascensor.
uncen... lo que dice que soy la coordinadora del curso de japonés...

Research&destroy dijo...

Estamos deliberando sobre qué ruido pornerle a los vecinos, pero es que los cabrones no hacen ningún ruido!

Pablo dijo...

Esto es lo que necesitas:
http://www.thinkgeek.com/gadgets/electronic/c427/

Research&destroy dijo...

Excelente idea, el eviltrón, cómo no se me había ocurrido antes!

Álvaro Herreras dijo...

En respuesta a tu pregunta, un rotundo si, muerte a los vecinos. Yo desde una vecina sorda que dejaba la radio encendida toda la noche a su volumen habitual a una familia de energúmenos arriba que se movía hasta la lámpara.
Cómo joderles? Nunca lo supe, la señora sorda era relativamente razonable, los energúmenos tan irrazonables que cualquier intento de provocarles habría sido peor.
Ajo y agua o una mudanza en condiciones.